Pensaréis tras leer el titular, “pues vaya chapuza, si van a hacer un repaso a todo el año así rápidamente, va a ser un completo desastre”. Seguramente creeréis que habrá cosas que se queden fuera, que no estarán puestas y que podríamos incurrir en el error de destacar aquello que no tiene la menor importancia. Bueno, pues vamos a ver.
Si he optado por hacer un análisis ‘así rápidamente’ es por una razón: por que en lo espontáneo es donde se refleja lo importante. Si a cada uno de los que estamos aquí les pedimos que hagan un resumen rápido del año, “ya, venga, sin pensar”, ¿sabéis lo que ocurre? Que os saldrá de dentro lo que en vuestra cabeza habéis guardado con la etiqueta de ‘relevante’, de ‘recordable’. Y de lo que no habléis, pues no dejará de ser importante pero no lo será tanto como eso que sí mencionéis.
Yo en muchos años de los últimos (casi) 24 he realizado reportajes de ‘Lo mejor del año’ super detallados, super sesudos, analizando mes a mes, día a día cada acontecimiento y reseñándolo con un comentario. ¿Sabéis qué? Que eso está muy bien para hacer un resumen, para que quede constancia como una especie de sumario de 365 días enteros. Pero ese no es el objetivo de este artículo. Aquí quiero volcar lo primero que me salga de dentro, pensando sin la ayuda de un listado de juegos que puedan ayudarme. Simplemente lo que mi cabeza ha decidido guardar como importante, lo que no quiere decir que para todos vosotros lo sea. Y por cierto, ya que estamos, ¿qué os parece si hacéis vosotros el mismo ejercicio? Empecemos.
Para mí el año empieza con la llegada de Tomb Raider Definitive Edition y Thief. Dos grandiosas novedades que serán recordadas durante mucho tiempo aunque sigan con esos ‘engines’ híbridos que tan pocas alegrías nos han dado. No estuvo mal como inicio aunque marzo sí que venía cargado de muchas novedades.
De ese mes hay que quedarse con Titanfall, uno de los juegos revelación de 2014, que ha sacudido el panorama de los ‘shooters’ con un vigor que nadie esperaba. Ni el mismísimo Call of Duty, que le ha cogido algunas ‘ideicas’. ¡Ah!, en ese mismo mes recuerdo el engaño del ‘Tocomocho’ de Konami, que sacó la primera ‘demo’ jugable de la historia que costaba 30€ y que se vendió como churros. Kojima es un genio, además de un tuitero culinario de primera división.
Por esas fechas hay que acordarse sin duda de Dark Souls II, el gran juego de From Software que a algunos se les quedó grabado que dijéramos en nuestro análisis que era muy difícil, y que eso no estaba del todo bien. Hay veces que lo evidente hay que destacarlo, por extraño que parezca. ¿Más? Pues lo siguiente que tengo en la cabeza es el lío de Watch Dogs: que si ‘downgrade’ gráfico, que si 1080p en PS4 y luego no… pero lo que más me llamó la atención y me ‘dejó tó loco’ (que diría alguno), fue lo de la trama argumental del juego. Menudo bajón. Uno que pensaba que estaba liando la que estaba liando en nombre de la paz mundial, y todo es por culpa de una ‘vengata’ familiar de tres al cuarto.
Llega el E3 y con él, antes y después de celebrarse, las malas noticias: retrasos, retrasos y más retrasos. Uno detrás de otro, de juegos que sí serán ‘next-gen’ al 100% y que llegarán a las tiendas un año y medio después de salir al mercado PS4 y Xbox One. ¿Algo destacable de la feria? Pues que Microsoft reconoció un año después que su consola era cara y que costando 100€ más que su competencia Sony tenía ganada la batalla de largo.
Esto trajo un daño colateral: Kinect, que aunque sigan diciendo que será importante para la plataforma, lo único que quedó claro con esta bajada del precio (y su expulsión de los packs con Xbox One más baratos) es que el sensor de movimiento tendrá que esperar unos 10 ó 20 años hasta que alguien en Redmond le encuentre un sitio en nuestra habitación. Por el momento, como ya ocurrió en Xbox 360, Kinect es más un estorbo que otra cosa. Del E3 dos recuerdos vívidos: Uncharted 4 y GTA V para la ‘next-gen’.
Con el verano llegó la Beta de Destiny, que nos pareció a todos los que lo jugamos que iba a ser uno de los grandes títulos del año. Lo ha sido, pero más por su ‘hype’ que por méritos propios ya que es un MMO que cabe en una cajita de cerillas, aunque tenga cosas muy buenas y que a Bungie le servirán para confeccionar mejor su futuro Destiny 2. En julio llegaba uno de esos títulos por los que muchos se compraron una PS4: The Last of Us Remasterizado. ¿Cómo resistirse a uno de los mejores desarrollos de los últimos años? Llego, mandó y triunfó.
Con septiembre llega la avalancha de juegos, de lanzamientos de esos que todo el mundo espera y que seguramente todos tenéis en la cabeza. ¿Algo que destacar? Pues mirad, me cuesta horrores encontrar una perla de esas de la que uno pueda decir “qué bueno y qué bonito”. Han llegado grandes juegos, pero por unas razones o por otras todos han fallado en algo.
Alien Isolation es con diferencia el mejor juego de la franquicia de siempre: te atrapa, te mete el miedo en el cuerpo y, tal vez, a medida que lo juegas se va desinflando por una excesiva dificultad a la hora de encararte con el alien. Seguramente si el juego te fuera llevando un poquito más de la mano, sería absolutamente soberbio.
DriveClub de Sony no hace falta decir qué pasó. Horror, espanto y pavor. Como en el caso de Assassin’s Creed Unity, que nos ha entretenido en las últimas semanas por el culebrón de sus desaguisados técnicos, o Dragon Age Inquisition, que aunque es un fenomenal juego, de notable, nos ha dejado a los que esperábamos un regreso de verdad a los orígenes un poco ¡¡choff!! Cuando te pones, es más disperso y menos contundente que lo que hubiéramos deseado.
¡Ah , sí! Tengo que destacar que me está divirtiendo más Assassin’s Creed Rogue que Unity. Con razón nos temíamos que iba a ser mejor el juego de PS3 y Xbox 360 en lo ‘jugable’ y así ha sido. ¿Si no, qué sentido tuvo que Ubisoft lanzará su Black Flag en 2013 dando un giro tan grande a la franquicia respecto de entregas anteriores? Como Assassin’s Creed Victory siga la estela de Unity… vaya ladrillo.
Hay algunos juegos por ahí que no he probado, y que espero a las navidades para hacerlo: La Tierra Media Sombras de Mordor o Lords of the Fallen, por lo que esperaré si hace falta para actualizar al que he considerado el mejor juego del año, que lo tenéis justo aquí a continuación.
¿El juego del año?
Pues volviendo al sistema de elegirlo así rápidamente, sin pensar mucho, solo ‘tirando’ de sensaciones, hay uno que quiero destacar y que cuando lo vi en el E3 2014 no me llamó absolutamente nada la atención, pero cuando y lo he jugado en profundidad en la tranquilidad de mi casa, me parece con diferencia de lo mejor de este 2014: se llama Sunset Overdrive y de verdad que es un soplo de aire fresco entre tanta franquicia repetitiva, ante tanta fórmula reutilizada y ante tanto ‘videojuego de alta alcurnia’.
Como siempre, esto es una opinión y recuerda que tú puedes dejar la tuya aquí abajo. Es más, os pido que lo hagáis por que siempre es bueno ver qué valoráis cada uno, desde vuestros propios puntos de vista.
¡Ah!, y como no nos leeremos en ese Blog hasta 2015, que tengáis una Feliz Navidad y un Próspero Año Nuevo.
¡¡Gracias por estar siempre ahí!!
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FG_AUTHORS: Jose Luis
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