Eizan escribió:
Quote:
«La grandeza moral de un país se mide en la forma en la que trata a sus animales».
Gandhi.
Interesante apreciación; mi querido símio Eizan te parece inmoral desearle la muerte a un animal que está sometido por un homínido prehistórico. El hombre a lo largo de su história a utilizado el sacrifício para los animales como forma de liberación, sobre todo si padecen una enfermedad terminal que no tiene cura. LA adopción de un animal, es más domesticarlo es una enfermedad asintomática; como la tensión arterial alta, llegado el día sino te has cuidado puedes experimentar un infarto incluso una muerte súbita. La crianza de un animal salvaje ó asilvestrado para domesticarlo, es antinatural. No sigue sus instintos primarios, ¿os parece normal lanzar un palo para que lo recoja y lo entrege a su dueño? !!!o una pelota de tenis¡¡¡, ‘claro que siempre os quedará el bote de pelotas de tenis para venderlo al párroco de vuestra iglesia, «el padre Damián»‘. Terrible verdad, vender un bote de pelotas vacío por 50 €, a un amigo aparentemente, cuando se trata del clérigo que se tira a tu esposa, vaya chantaje. Nada es lo que parece en el planeta de los simios, Eizan. Todo se transforma. Sugerir el sacrifício de un animal sometido es un eufemismo, desearle la libertad una deidad.
Eizan la religión principal de la India es el hinduismo, sabes que llegan a respetar hasta los insectos. Imagínate que un día de fiesta, has quedado con la familia para hacer una barbacoa, un delicioso asado de cordero, uhmmmmm, que maravilla. Una vez has terminado estás cansado, somnoliento. Te has atiborrado de carne, eres un glotón porque te encanta la carne a la parrilla. Te dejas llevar por el instinto y caes rendido en una amaca, tus jugos gástricos empiezan a descomponer la carne que has devorado y el aumento de ácido hace que tu cuerpo reaccione. Empiezas a segregar más saliva de lo normal. Traspuesto, pierdes algo de baba por la comisura del labio, cualquiera, según tengas la cabeza ladeada. Al tiempo que una mosca cojonera que previamente a succionado los jugos de los excrementos de un can, en una parque público controlado por un guarda desgraciado. Yo por ejemplo. Una vez que el insecto se ha alimentado, está sediento, necesita hidratarse para hacer bien su digestión. Encuentra a un humano durmiendo la siesta con un vergel en su boca, sin vacilar se posa en su labio para consumir el brebaje. Pero ocurre algo insólito; la sensibilidad de tu boca hacer que te despiertes repentinamente, estás de mal humor una mosca cojonera a interrumpido tu siesta. Instintivamente te llevas la mano a tu morro, jeta, hocico, con el único propósito de matar al insecto; estás tan molesto que no te importa que tenga su proboscide «comidita de mierda», que el acto principal sea antihigiénico. Sólo quieres matarla por haber interrumpido tu función de sueño. Vaya representación, un espectáculo dantesto, deplorable como ya sabeis. Pero aquí sólo importa el bien estar del símio, como con sus mascotas, vaya paradoja.
Las religiones son tesis que educan nuestros sentidos, dandonos esperanza con la vida eterna como atractivo para atraer nuestra atención que es una quimera, pero con propia identidad moral y ética que se trata de la cuestión principal de estos filósofos de su época, educarnos. Cada cual que interprete la vida a su manera.
Siempre tuyo mi querido Eizan, un cordial saludo!!!
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